¡CÓMO SE LO PASAN!

Los niños y niñas saharauis de la foto son “enloquecedores, a pesar de que no veamos sus rostros en esta foto. Enloquecedores, en un doble sentido. Por un lado, enloquecedor como sinónimo de maravilloso, cautivador o alucinante; por otro, porque a veces te vuelven loco. Estos niños y niñas nacieron ya refugiadas y crecen y se educan en campos de refugiados. Hoy la presencia de una fotógrafa en la biblioteca ha hecho que detengan su juego por un instante y “posen” entre risas y bromas mostrando sus manos. Porque saben que esa foto la verás tú, lector o lectora anónimo, por medio del Bubisher. Nos muestran sus manos y dedos con determinación para que comprobemos lo trascendental que es el juego para ellos y ellas. En el desierto de los desiertos, en plena hamada, y  aparentemente indiferentes a la dura realidad circundante, además de libros y kamishibais, no faltan ni los juegos ni las risas en los nidos del Bubisher. Y menos mal.

Fíjese nuevamente, anónimo lector o lectora, en la foto que encabeza este artículo. Durante diez segundos, cuente una a una las pequeñas piedras negras que aparecen en vertical, tras lo cual deberá cerrar los ojos y volver a contarlas durante diez segundos hasta que la imagen se fije en su mente. Luego, vuelva a abrir los ojos y cuente una a una las piedras alineadas horizontalmente de derecha a izquierda. Finalmente, vuelva a cerrar los ojos durante diez segundos. ¿Acaso no percibe sinestésicamente las risas de esos niños y niñas? ¿Será acaso por no hacer espacios de diez segundos? ¿Quizás por no contar todas y cada una de las pequeñas piedras negras? ¿Acaso por no haberlas contado de derecha a izquierda, sino de izquierda a derecha? De cualquier de las maneras, si todavía no percibe las risas de los y las saharauis, vuelva a realizar el procedimiento hasta que las sienta. Bien sabemos que el juego y la risa no son la solución al conflicto saharaui, pero sí suponen un notable e imprescindible alivio ante una dura realidad que dura ya medio siglo.

Josu Jimenez Maia, escrito

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

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