TIEMPO

Se puede construir un muro, fabricar un zapato, una caja o una mentira. Y el tiempo, ¿se puede fabricar? El tiempo de calidad. Ese que anhelan muchas personas, para pasarlo a solas, con sus seres queridos, sean mayores o pequeños, o para ayudar generosamente a los demás.

Cargados de obligaciones diarias, algunas duras de roer, no disponemos de nuestro tiempo. Vamos corriendo tras las horas, pensando que ya vendrán otras mejores, más plenas. Sí, nos falta tiempo. Tiempo sin muletas. Como la lectura que está disfrutando este niño con ¿su padre, tío o hermano mayor?  Da igual. Lo importante es que está en buena compañía. Sin distracciones ni pantallas. Aunque cerca de ellos hay un peligro. El nombrable en todas las conversaciones. Nuestro tercer brazo como algunos le llaman. Siempre presente. Inamovible y al mismo tiempo movible. Todo negro, de espaldas y aparentemente en reposo. Pero como todos sabemos, su fondo es un organismo, aunque luminoso y artificial, es vivo y adictivo. Lleno o vacío de contenido, según se mire.

Supongamos que el móvil de la instantánea es de este joven de turbante azul de dos metros de largo. Si es así, ¿por qué no lo guarda en su yelabía? Su rostro severo parece decirnos que por el momento no está para otra cosa, que no sea señalar con su dedo índice las palabras, el texto, para que el niño las vaya deletreando: d, e, d, e, de, d, o, do; dedo…

Y el muchacho está fascinado. Le divierte descubrir que puede levantar y mover la tierra del texto con el par de azadas de sus ojos. Está descubriendo el poder de la lectura, de la imaginación, que es mucho más vasto y grandioso que el de las manos y los pies.

El físico y poeta catalán, David Jou dijo, que la diferencia entre el tiempo y tu tiempo, es que el primero es universal, inacabable, inmenso y el otro: finito, relativo, íntimo.

No cabe duda, de que nuestro tiempo es finito, relativo, íntimo. Y no nos queda más remedio, que batallar por transformar parte de este tiempo en nuestro, y en favor de los demás. Eso es lo que ha hecho este proyecto, creando las condiciones idóneas para momentos sencillos y al mismo tiempo sublimes como los de esta foto.

Liman Boisha

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *