Dos noches del Bubisher. Dos noches llenas de emociones. Hace ya diez días, la primera en el Nido, con muchos saharauis, y también con españoles tan imprescindibles como Juan Carlos Gimeno. Con pinchitos de elham smell, carne de camello, torrijas de Clara y… Luz de estrellas. «La curva†del Nido nos acogía con sus luciérnagas, y hablamos de bibliotecas, del significado de la palabra, de cómo llenarlas de contenido: resonó la voz de García Lorca, «dadle a un niño que pide pan medio pan y un libro entero 
Y la segunda, este miércoles, en el Mahbés, en la siempre acogedora casa de Chejdán, tal vez el poeta más vitalista de la Generación de la Amistad. Estaba también Luali, sereno y hondo, y Mohamidi, el poeta que desliza la sonrisa perenne de sus labios a sus versos. Esta vez fue Conchi Moya la invitada de honor. Ella no estaba, pero estaban sus palabras, su sensibilidad saharaui, su tierno corazón esposado de henna. Fuimos leyendo uno a uno fragmentos de su libro, «Delicia saharauis» y así prolongamos el acto de la Biblioteca de Aluche en la que fue presentado este mismo mes. Y así logramos que nos llegara el eco de Javier Perote, de Limam, de Calvente, de Manolo Domínguez…. Qué fácil es tejer cuando el hilo quiere.
Memona leyó el capítulo en el que Conchi evoca a Belga, el hombre sabio que sabe divertir, que ha atesorado en Dajla el testimonio vivo de su busca de lo más profundo de la personalidad saharaui. Si queréis conocerle, leed el libro, merece la pena. Belga fue vecino de Memona en la infancia de esta, y ella aún recordaba sus titeres, sus historias y… Su huerto. Y para allí nos fuimos, este viernes. No le encontramos, pero nos sentamos a la sombra de las plantas  de algodón y las palmeras de su huerto. Pasamos un rato con una de sus jóvenes vecinas, leímos un poco de las palabras de Conchi Moya allí mismo, por ver si también germinan.
No le vimos a él, pero disfrutamos de la paz de Dajla, que aún representa la vida campesina en el vértigo ciudadano en el que se han convertido, poco a poco, los campamentos. La noche del Bubi fue mediodía en Dajla.
Y esta noche veremos aparecer por el este la luna llena, y al verla pensaremos en todos vosotros, los que leéis esta crónica y la hacéis posible con vuestro trabajo diario, con vuestro aliento. Hay un poco de siroco, y en los dedos que teclean hay polvo de adobe. Como en el poema, también polvo enamorado.
20 marzo, 2011 en 2011-03-20T01:28:00+00:000000000031201103
Gonzalillo, el desierto te inspira. Hacía mucho que no leía un post tan bonito. Cualquier cosa por estar ahí, en las noches de palabras, y en los días de búsqueda tras las huellas de Belga. Al que por cierto he descubierto estos días a través de las magníficas fotos de Ricardo Ramírez. Otra de esas casualidades entre tú y yo;)
20 marzo, 2011 en 2011-03-20T08:30:00+00:000000000031201103
Para todos, un abrazo. Para Luali, el recuerdo imborrable de la risa que nos hizo pasar una noche de invierno en Cercedilla
20 marzo, 2011 en 2011-03-20T08:53:00+00:000000000031201103
Gonzalo, emociona leerte, y sentiros a través de tus palabras. Un abrazo enorme para todos desde aquí. Os tenemos presentes, en las noches y en los días…Siempre.
20 marzo, 2011 en 2011-03-20T12:40:00+00:000000000031201103
Generación de la Amistad, Gonzalo, Smara… partes fundamentales de mi familia saharaui y de mis delicias. Gracias Gonzalo por hacerme tan feliz llevando Delicias a los campamentos, ni en mis mejores sueños. Os quiero.
20 marzo, 2011 en 2011-03-20T15:58:00+00:000000000031201103
¡ Qué dulzura! Nos haces sentir y vivir esos momentos tan mágicos.Gracias.
21 marzo, 2011 en 2011-03-21T12:34:00+00:000000000031201103
muchos besinossss
muchos
21 marzo, 2011 en 2011-03-21T14:48:00+00:000000000031201103
Debe ser eso… que el desierto inspira. ¡Cuanto me gustaría conocerlo! Pero aún aquí en la distancia mi imaginación se dispara y soy capaz de vivir, aunque sea tan solo una noche,
bajo el cielo de ese desierto. Gracias, Gonzalo, por compartir.
25 marzo, 2011 en 2011-03-25T20:10:00+00:000000000031201103
Me alegra mucho ver esta foto del interior de la biblioteca, y sobre todo ver a las personas que la pueblan.
Dentro de pocos días empiezan las Jornadas de Bibliotecas en Ballobar. Gonzalo no había faltado nunca y son las quintas. Y Clara las ha recorrido también en varias ocasiones.
El Bubisher estará presente: con Bea, Iñaki, Mariajo, Paco, Pepa, Merche, Marisa, Mariona… y yo misma, además de las camisetas, los jabones que van a vender los jóvenes del pueblo para el proyecto, algún que otro documental, una exposición de fotos del Sahara, un folleto para las carpetas, chapas (todo el merchandaisin)…
Si nos escribís algo desde allí lo haremos pasar a la gente.
Y el lunes 28 presentamos el Pan de Lectura, donde también está el Bubi presente. Ya os contaremos.
Muchos muchos muchos besosssss (permitidme uno más fuerte para Clara)
25 marzo, 2011 en 2011-03-25T21:27:00+00:000000000031201103
Cuarenta días con sus noches sin ver la cara de mi hija me premian con esa imagen en la que la reencuentro en tan buena compañía. Arquitectos discretos de utopías irrefrenables, como no sabían que era imposible, lo hicieron. Besazo para Clara y Roge. Para Gon y el resto un abrazo hasta la luna desde mi válvula mitral y alrededores. Cada día se nombra a Bubi en el Carei, donde trabajo ahora, las exposiciones no paran de revolotear de cole en cole y en el barrio andan leyendo a Caramelo. Ahora mismito me lo comentaba, bajo la amable llovizna que nos visita, Mamen, la bibliotecaria del barrio Delicias de Zaragoza, qué delicia. Sentíos respaldados, nos nutrís de esperanza. Hermanas y hermanos saharauis, cálida familia, sigamos haciendo lo soñado.