La violencia es la seña de identidad de la sinrazón. De la bestia. Aterroriza a quien la sufre y degrada a la categoría de inhumano a quien la practica. El camino para erradicarla es la tolerancia, el diálogo, la empatía.

Educar y concienciar a los niños y niñas de que la convivencia en paz es el camino para lograr un mundo más justo, es tarea de todos.

Hoy, un grupo de jóvenes voluntarios saharauis de la Asociación Nova impartieron un taller sobre la no violencia en la biblioteca Bubisher de Auserd. De nuevo los jóvenes toman la batuta para tocar aspectos de la educación de niños y niñas que van más allá de asignaturas regladas. Porque la educación no solo es enseñanza, es trabajar en todos los aspectos que permiten una formación integral. Y la no violencia es una asignatura cuyo contenido es amplio. Y su objetivo, hacernos más humanos. Trabajarla en las aulas, en las bibliotecas, en el hogar … en todos los lugares donde niños y niñas viven y conviven es sembrar semillas de concordia.