Se acaba el primer trimestre de este complicado curso en el que no hemos contado con voluntarios españoles, en el que ha comenzado la guerra y el covid es una especie de nube que planea sobre nuestras cabezas. Un trimestre en el que, sin embargo, hemos logrado mantener las bibliotecas llenas de niños y en el que se han llevado a cabo varias charlas para adultos. En el que el trabajo en las escuelas ha sido magnífico y el Bubisher ha revoloteado por todas las dairas de las cuatro wilayas. En el que los jardines, ajenos a los problemas, nos alegran y nos ayudan a explicarles a los niños la importancia de cuidar el medio ambiente.
Un trimestre que cerramos todos juntos en Dajla, en cuya biblioteca nos hemos reunido para hacer balance y planificar nuevas estrategias para el próximo trimestre. Un día precioso que completamos con una pequeña excursión a las dunas, donde tomamos un té y seguimos hablando de todos los progresos que hemos hecho y de todos los retos que tenemos por delante.
Y finalizamos este encuentro con la sensación de que somos un equipo que trabaja unido y que es esa unión la que nos da fuerzas para seguir avanzando, para que el Bubisher siga siendo el proyecto que lucha por la expansión de la cultura en los campamentos.
Bibliotecarias y bibliotecarios Bubisher