La gran ventaja de las bibliotecas del Bubisher es que te permiten viajar con gran facilidad desde los campamentos de refugiados saharauis por todo el mundo. Esta chica puede ir con la idea de leer El principito y parece estar buscando ese título concreto…, o cualquier otro, porque a veces son los libros los que te encuentran a ti. Además, está buscando un libro en árabe porque cada vez son más numerosos los títulos en el idioma propio que están disponibles en nuestros estantes.
Hay otros miembros de la gran familia del Bubisher que están lejos de allí, que solo pueden acudir a esas bibliotecas mágicas de vez en cuando y que pasan su exilio interior pensando y creando en torno al imaginario del Sáhara. Es el caso de Susi Alvarado, que presentó el pasado 1 de abril El principito ha vuelto, una reflexión mágica sobre un viaje al desierto acompañada de la fotógrafa Teresa Correa; y de un encuentro inesperado, como son muchos de los que suceden en este paisaje.
Y es que el principito ha vuelto ya convertido en hombre: “La misma pose, el mismo pelo, la misma posición de los brazos, incluso la misma montaña detrás…”
A veces ni siquiera hace falta viajar muy lejos porque muy cerca, en la badía o en la hamada, está el relato que nos estremece. A fin de cuentas, todos somos hijos de nuestra infancia y “todos guardamos un desierto en nuestro interior”
Emilio Sánchez Blanco