CARPE DIEM

No saben quién fue Horacio. No saben que fue él quien dijo esas dos palabras, que no entienden, del título. Simplemente se van a dedicar a vivirlas. Las niñas y los niños, que han iniciado sus Vacaciones en Paz, en España -hoy han llegado a Santander quienes las van a disfrutar en Cantabria- van a vivir cada momento, no como si no hubiera un mañana, sino como si todos los mañanas cupieran en un momento. No se van a olvidar de dónde vienen y saben que allí volverán, porque allí les esperan quienes más les quieren, sus familias, sus amigos, sus vecinos. No se olvidarán de sus maestros y sus enseñanzas. No se olvidarán de los bibliobuses Bubisher, que llevan a sus escuelas y dairas libros y juegos. No se olvidarán de las bibliotecarias y bibliotecarios de las bibliotecas Bubisher, que les abren ventanas a otros mundos, como en el que vivirán durante unas semanas…No olvidarán nada, de lo que han dejado lejos, porque todo eso también lo han vivido, y lo seguirán viviendo, con esa intensidad del momento que se vive fuera del tiempo.

Cambiar la arena del desierto por la arena de una playa; el calor asfixiante del desierto por la brisa de un mar; el sol abrasante del desierto por la sombra de un parque; el trago de agua tibia, cuando no caliente, de las cubas del desierto por un refresco, con o sin burbujas, o un helado del gusto preferido…En fin, cambiar los días con el paisaje de la hamada por otros días con paisajes diferentes, no propiciará que los pequeños saharauis se olviden de quiénes son, lo que no será un inconveniente para practicar “el carpe diem”, como si supieran lo que significa y quién lo dijo. Se diría que, cuando Horacio se lo aconsejó a su amiga Leucone, estuviera pensando en los niños, en general, y, en particular en los niños saharauis, que durante dos meses de verano tienen la oportunidad de vivir días muy distintos a los que viven en los campamentos de refugiados. Y los aprovecharán a tope, minuto a minuto, que en eso consiste el “carpe diem”, aunque no lo sepan. Ni falta que les hace.

Fernando Llorente

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