Es difícil poner palabras que definan nuestra estancia en el Bubisher de Auserd.
Han sido sólo unos pocos días, pero ha sido una experiencia maravillosa. Ver esas caras llenas de atención, esos ojos que expresan emoción y deseo de continuar escuchando y aprendiendo, es indescriptible.
Desde el primer momento, en que Alghailani, Bea y Hamida nos recibieron, nos sentimos entre amigos. La sintonía fue estupenda y no hizo más que aumentar con cada hora que hemos pasado en el Bubisher. Cada persona que participa aporta al Bubisher una parte de sí mismos, y nosotros esperamos haber dejado allí un poquito de nosotros, aunque sea un poquito, porque nos sentimos muy orgullosos de haber podido acercar el mundo de los cuentos, con su sabiduría y su fantasía, hasta un lugar tan olvidado como los campamentos de refugiados saharauis. Sus niños se merecen vivir esos momentos, y sus mayores se merecen tener la oportunidad de separarse un poco de la realidad de la hamada, y poder acudir al Nido del Bubisher, donde dejar volar la imaginación y transportarse a otro lugar.
Tenemos la sensación de que ha sido demasiado poco tiempo, y necesitamos volver; volver a colaborar en este precioso proyecto. Sentimos la necesidad de ver cómo cada semana esos niños y niñas se acercan más y más a la lectura, mejoran su escritura, y se enganchan al Bubisher. Ver cómo esperan cada día ser ellos quienes suban al autobús, quienes escuchen el cuento, quienes hagan las actividades…Porque todos quieren participar del Bubisher.
Seguiremos trabajando aquí, porque sabemos que queda trabajo por hacer: hay que llenar de libros las estanterías de los Bubisher y hay que continuar apoyando la labor de sus trabajadores.
No podemos terminar sin daros las gracias por dejarnos participar. Gracias también a Hamida, y sobre todo: Gracias Alghailani, porque ahora tenemos, no sólo un compañero de bibliobús, si no un amigo en Auserd. Tu compañía ha sido muy gratificante, tu trabajo maravillo y tu sonrisa permanente ha hecho de nuestros días en los campamentos un tiempo inolvidable.
Gracias a todos, a los de aquí y a los de allí,
Blanca, Javier, Miriam, Natalia y Fernando.
25 abril, 2012 en 2012-04-25T07:33:00+00:000000000030201204
¡Qué grandes sois, Alouda! Así es más fácil seguir caminando, mano con mano.
29 mayo, 2012 en 2012-05-29T17:34:00+00:000000000031201205
Claro que sí! Me siento ligada a todas y todos vosotros, a pesar de no conoceros… Quizás algún día! Inshahlá! (o como se escriba…)