(“Si un niño te pide pan, dale medio pan, y un libro” -García Lorca.)

Para nosotros, claro. Y para miles de niños, jóvenes y adultos saharauis de los campamentos que ahora tienen acceso al libro, a la cultura, a la libertad.

El día del libro no puede convertirse en el día del negocio del libro, tiene que ser el DÍA DEL DERECHO A LOS LIBROS. Un derecho universal.

Bubisher significa más de diez mil libros en las cuatro bibliotecas y los cinco bibliobuses, en árabe y español. Las editoriales que nos han donado generosamente muchos de esos libros. Los cientos de mercadillos de libros usados con cuyas ganancias se compran los nuevos en las librerías de Orán. Los libros editados por nosotros mismos con la ayuda desinteresada de Edelvives. Los miles y miles de niños españoles que al comprar uno de ellos han levantado las paredes de las bibliotecas, plantado sus árboles, pagado los salarios justos de las bibliotecarias y los monitores.